Partiendo de la central hidroeléctrica de O Parrote, la cual ya he comentado su situación en anteriores publicaciones, decidimos continuar en coche el camino que otro dia habíamos recorrido a pie.
Al poco rato, encontramos un cartel informativo. En ese momento aparcamos el coche y fuimos a echar un vistazo.
El rótulo indicaba el comienzo de la Ruta Da Pasa Vella. Si consultais el mapa es el sendero cuya línea tiene un color "rosa claro".
Para una mejor localización os apunto, a continuación, las coordenadas de dicha encrucujada:
- 43º 24´11.8" N.
- 8º 01´57.5" W.
Después de leer la información emprendimos la marcha. En los primeros metros de la ruta hay una pendiente algo pronunciada, pero de corta distancia. A partir de ahí el camino es muy llevadero.
En el punto de inflexión de la cuesta hay un mirador natural para sacar una foto. Yo, por lo menos me decidí a hacerlo.
Acto seguido, transitamos por una nuevo tramo de la ruta, la cual iba serpenteando en bajada. Como podeis apreciar el la siguiente foto, el terreno se compone de piedras finas.
Al transcurrir 1 hora, más o menos, llegamos a nuestra meta, la presa. Allí observamos que el camino continua a lo largo de la orilla del rio hasta llegar al dique.
Exploramos un poco la zona, al instante medité una cuantas ideas. Entre otras, la buena disposición de la zona como lugar de recreo, ya que, es muy valida para todo tipo de actividades náuticas, y un buen lugar para hacer un descanso a comer, mientras, claro está, disfrutas de la naturaleza que impregna de sensaciones la ocasión.
Si me perdonais, voy a realizar un pequeño inciso para mostrar una de mis fotos artísticas.
Más tarde, tomamos el camino de regreso, aunque esta vez no tornamos por la misma pista. Como vimos en el mapa había una bifurcación el la ruta, que al final conducía al mismo lugar.
En las indicaciones que leímos antes, pudimos ver que en esa dirección nos encontrariamos una ermita, y acordamos visitarla para ver si era interesante.
Ahora el tipo de terreno era más natural, una senda, diría yo. El clima estaba variando. Las nubes, con progresión, ocultaban el cielo azul. Por ello, aumentamos el ritmo del paso.
Aún teniendo la incertidumbre de un posible chaparrón y posterior mojadura, la ruta me estaba agradando, sobretodo esta parte final. Es cierto que yo prefiero este tipo de itinerario, a lo que yo me refiero al escribir sobre senderismo.
Esta senda finaliza en el camino asfaltado que proviene de la central hidroeléctrica. Justo en esa interseción hay una buena panorámica de los cañones que forja el Rio Eume.
1 comentario:
Non e Da Pasa Vella,
E "Pasadavella"
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